Cuando uno es nuevo como yo en esto de hacer casas, sobretodo autodidacta, y con la suerte de vivir donde vivo rodeado de materiales e historia lo lógico es experimentar y buscar rescatar lo que de alguna manera ya nadie quiere. Fusionar lo que para muchos es basura, dar cariño, crear desde lo que ya fue…. restaurar, adaptar.
Rescatar por la sencilla razón de que ese recurso natural ya fue alterado y poder usarlo otra vez evita que tengamos que seguir desgastando el planeta.
No es tarea de uno, ni de un grupo, ni de país o el responsable político o religioso que por cuestiones del destino nos toque tener que soportar. Depende de cada quien, de la suma de todas las voluntades individuales haciendo lo que cada quien pueda según sus circunstancias. Poco a poco…